El metro de Nueva York

El transporte metropolitano en Nueva York está muy bien organizado así como destaca por su rapidez.

El más conocido es el transporte subterráneo, es decir, el metro. El metro de Nueva York es uno de los más importantes a nivel mundial, tanto por el gran número de líneas que tiene así como por su rapidez. Está regentado por la empresa MTA (Metropolitan Transport Authority).

El acceso al metro se hace a través de unos tornos que se accionan al pasar por un lector el billete adquirido. Una vez que estás dentro, debes dirigirte a la plataforma que viaja en la dirección a la que deseas ir. Ten mucho cuidado con los sentidos, pues si escoges uno u otro acabarás en una punta de la ciudad o ¡en la completamente opuesta! En algunas paradas, debes elegir el sentido en el que viajarás antes de pasar por el torno; en otros, simplemente lo decides una vez que ya lo has pasado.

El billete de viaje puedes adquirirlo en las máquinas expendedoras que están situadas una vez que estés en la boca del metro. Cada viaje cuesta $2. El menú de la máquina expendedora está en varios idiomas, entre ellos el castellano.

Nuestra recomendación es que adquiráis la tarjeta MetroCard, que permite sacar un billete válido para más días a la vez que te permite ahorrar. Como vuestra estancia será de tres semanas, os aconsejamos que compréis el bono de 7 días, y que lo renovéis una vez que hayan acabado los siete días.

A continuación os facilitamos las modalidades de MetroCard existentes:

1. Ilimitada por un día (daily o fun pass). Puedes coger el metro tantas veces como lo necesites en 24 horas. El precio es de $7,50.

2. Ilimitada por 7 días (weekly). Durante 7 días, podrás usar el metro tantas veces como quieras. Su precio es de $25. Esta es nuestra recomendación.

3. Ilimitada por 30 días (monthly). Podrás usar este billete en el metro tantas veces como quieras y necesites durante 30 días. El precio es de $81.

Recomendamos que compréis una tarjeta MetroCard por persona, es decir, que no la compartáis, porque podéis encontraros con el problema de que uno de vosotros se queda solo en la parada. Las tarjetas tienen un sistema que bloquea la banda de la tarjeta durante 15 minutos tras la primera pasada por el lector del torno. Es decir, una vez que pases la tarjeta por el lector, no podrás volver a usarla hasta dentro de 15 minutos. Es un sistema para que la tarjeta sea unipersonal e intransferible.

El metro de Nueva York tiene más de 500 estaciones por toda la ciudad (no sólo en Manhattan) y posee más 24 líneas. Cada línea tiene asignada un color y un número que os permitirá diferenciarlas.

Advertiréis que algunas líneas de metro poseen dos carriles en la misma dirección. Debéis tener especial cuidado con este tipo de líneas, pues un carril es expreso y otro es local. El expreso, como su nombre indica, es mucho más rápido porque no para en todas las paradas marcadas en el mapa de esa línea, sino que hace parada en cada 4 ó 5 paradas. El otro es conocido como local (podemos decir que es el normal), y hace parada en todas las paradas que encontraréis en el mapa de esa línea. Si no estáis familiarizados con el metro de Nueva York, recomendamos que siempre cojáis el metro local, porque así no os saltaréis vuestra parada.

Nuestra última recomendación es que, nada más entrar en la primera boca de metro, pidáis un mapa del mismo. Llevadlo siempre con vosotros. Puede que al principio os resulte un poco complicado y lioso usar el metro, pero en poco tiempo os haréis con él.